Bajar de peso es una de las metas para muchas personas, pero al ser un proceso que requiere muchos cambios y esfuerzo, hay quienes optan por cosas más fáciles, pero que a la larga representan un riesgo de salud.
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Delegación Zacatecas, exhorta a la población a que evite el consumo de productos milagro.
“El consumo de los productos milagro, denominados en el mercado como suplementos alimenticios, no son medicamentos, al no ser medicamentos no entran a una regulación sanitaria, es por eso que se venden como suplementos alimenticios y ello desafortunadamente conlleva a que la gente los consuma desconociendo qué es lo que contienen y qué tanto puede perjudicar su salud”, informó Lilia Hernández Alvarado, coordinadora delegacional de Nutrición del IMSS.
El origen de estos suplementos se considera en teoría naturista, así los promocionan, sin embargo, al no pasar por criterios de calidad, difícilmente en sus envases se señalan las sustancias que contienen y los efectos que pueden resultar de su consumo.
La especialista en nutrición señaló que, “Normalmente traen lo que son las efedrinas o anfetaminas que generan, más que un efecto benéfico, daños a la salud, principalmente afectan el sistema renal o riñón, sistema endócrino y sistema cardiovascular, el corazón”.
Taquicardias, ataques o infartos al corazón, diarreas, o por el contrario estreñimiento, daños al hígado que es el que se encarga de limpiar el organismo de sustancias tóxicas, así como alteración en la presión sanguínea, niveles de glucosa altos, son algunos efectos secundarios.
La pérdida de peso, sin esfuerzo y de manera rápida y casi siempre muy económica, son las razones por las que la gente las consume, pero dejan de lado que es un efecto a corto plazo y el daño puede aparecer años después.
La base para un estilo de vida saludable es en 3 pilares: uno es la alimentación balanceada y correcta, no simple lechuga y agua natural; segundo, es la actividad física, 30 minutos al día, y en tercer lugar la ingesta de líquidos saludables, en este caso el agua simple y que se disminuya el consumo de refrescos o jugos industrializados.
Tomando en cuenta los 3 pilares fundamentales se reducen los riesgos a la salud, se obtienen resultados de una manera adecuada y que perduran, mientras se tenga el deseo y compromiso de tener una mejor calidad de vida.
FOTO: CORTESÍA