Los cofrades sumaron 25 mil y la asistencia de público fue de casi 90 mil personas, de acuerdo a las estimaciones de la Cofradía de San Juan Bautista, la cual por primera vez no obtuvo permiso de la Secretaría de la Defensa Nacional para comprar pólvora, pese a ello la tradicional celebración que cumple 198 años se hizo con las acostumbradas detonaciones.

Tras dos años de no realizarse regresaron con un ánimo renovado de los participantes, que acudieron de varios municipios donde también se hacen morismas como Guadalupe, Morelos, Vetagrande, Fresnillo y Pánuco.

Los cofrades hicieron el desfile con más integrantes por las principales calles del Centro Histórico, donde cientos de personas acudieron para presenciarlo, luego regresaron a Lomas de Bracho para continuar con las representaciones que comenzaron días previos.

La tradicional cruz en cerro cercano al cerro de la Bufa y la batalla entre moros y cristianos cerraron las morismas de este año, en las cuales los organizadores pusieron énfasis en que se evitaran riñas.

Marco Polo Mazatán, presidente de la Cofradía, indicó que pese a que se cumplieron todos los requisitos e hicieron los trámites las autoridades militares no dieron el permiso para el uso de pólvora, pese a lo cual los cofrades consiguieron por su cuenta de forma personal.

Indicó que aunque hubo venta clandestina solo se detuvo a una persona por realizarla, a fin de evitar de nueva cuenta que se niegue el permiso señaló que para el siguiente año se harán las gestiones con más tiempo.

Destacó la gran participación que superó a las de años anteriores, así como el apoyo de las autoridades para la realización de las fiestas en honor a San Juan Bautista, en las cuales se recordó en esta edición a quienes fallecieron en los últimos dos año debido a la pandemia u otras causas.

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