En el edificio G de Ciudad Administrativa se manifiestan desde la mañana de este jueves integrantes de la sección 39 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud.

Su líder sindical, Norma Angélica Castorena Berrelleza, explicó que su movimiento obedece a una lucha legítima en la que piden de manera pacífica y respetuosa a las autoridades de la Secretaría de Salud y de Finanzas que se respeten las prestaciones ya ganadas y otorgadas durante muchos años.

Aclaró que no se desatiende ninguna unidad hospitalaria. “No somos irresponsables, solo estamos luchando por defender nuestras conquistas y logros sindicales”, expresó.

Uno de los principales procesos que están pidiendo es la continuidad de un programa estatal de profesionalización de enfermería y trabajo social, que data de 2016, en el que cada año se otorgan 15 millones de pesos, pero que no está presupuestado para 2020

“Todavía nos quedan en las unidades casi 1.000 enfermeros, los cuales su perfil académico es de licenciados en Enfermería y están siendo pagados como auxiliares”, dijo.

Su lucha también es por el programa de estímulo de retiro, que consiste en un bono especial que se otorga a los compañeros que se van a jubilar “para que la gente se pueda ir con mejores condiciones de dignidad”.

Castorena Berrelleza dijo que esta prestación está ya negociada desde el año pasado en la Legislatura en la Comisión de Presupuesto y estaba acordado ser pagada a diciembre 2019.

Otra de sus demandas es que el bono navideño sea otorgado en los términos y condiciones que se hizo el año pasado, es decir, a través de un monedero electrónico, que tiene también la modalidad de disposición en efectivo y que no genera ningún costo más que la comisión a los servicios de salud.

“Nosotros tenemos este logro del bono en efectivo desde 1998, entonces no se puede de la noche a la mañana pretender tumbarle a los trabajadores esto”, expresó la secretaria general de la sección 39.

Destacó que su lucha también es por los trabajadores de contrato y suplentes que están pagados en condiciones de precariedad, ni siquiera en el tabulador que deben de tener, y para que se otorguen las vacaciones extraordinarias a los compañeros que ya se las ganaron.

Expuso que están siendo afectados 6.373 trabajadores sindicalizados y 400 trabajadores suplentes, que están en condiciones de que no tienen el tabulador.

Advirtió que su manifestación sería permanente y si fuera necesario quedarse a dormir lo harían. Por lo pronto esperan resolver de manera pacífica, pero de no ser así posteriormente determinarán las medidas que seguirán tomando.

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