Viernes 29 Marzo 2024

Gobierno es “mediador, no actor” en conflicto de Peñasquito

Gobierno del Estado, que ha fungido como mediador en el conflicto laboral entre particulares que mantienen transportistas y la minera Peñasquito en Mazapil, pidió voluntad y disposición para encontrar una solución que beneficie a ambas partes.

A través de la Secretaría General de Gobierno, se ha dado puntual seguimiento y atención al conflicto y, desde el pasado 2 de junio, se acudió al lugar con el propósito de dialogar con los manifestantes, algunos de ellos, ejidatarios.

Después de ese primer acercamiento, se logró establecer una mesa de diálogo, misma que se llevó a cabo el 5 de junio en las instalaciones de la Secretaría General de Gobierno, la cual fue encabezada por su titular, Fabiola Gilda Torres Rodríguez, y el subsecretario de Concertación y Atención Ciudadana, Alfonso del Real López.

Al día siguiente, con la asistencia de representantes de la empresa minera, se efectuó una nueva reunión, en las oficinas de la Secretaría de Economía, en la que cada una de las partes expuso sus argumentos en torno al conflicto laboral.

La mesa de diálogo sentada por el Gobierno del Estado fue trasladada el 7 de junio al municipio de Mazapil, en donde continuaron las negociaciones, se informó mediante un comunicado de prensa, en el que destaca que es un ente mediador en el conflicto, no actor.

Dichas negociaciones consisten principalmente en que la Unión de Transportistas y Trabajadores del Municipio de Mazapil sea contratada por la minera, tal como se estableció desde el 2009 en un acuerdo firmado por ambos, en el que se asienta que de manera preferente el trabajo debe ser destinado para habitantes de la región.

En esta ocasión, la Unión hizo llegar un pliego petitorio a la empresa, en el que piden respeto a los compromisos de dar preferencia de proveeduría y acarreo de material, pues, argumentan, el trabajo lo hace una empresa de capital español.

Al respecto, la minera ha señalado que para una parte de los trabajos se requieren camiones Triple 7, por el terreno y las características de la extracción de materiales, pero que los transportistas carecen de ese tipo de vehículos de acarreo.

Por ello, hace meses les hizo la propuesta de apoyo para la compra de los vehículos de carga que se traducía en lo siguiente: por cada 25 vehículos propiedad de los transportistas, se les daría uno Triple 7, además, se les proporcionaría una cantidad extra de financiamiento.

Las autoridades estatales se mantienen atentas a los acuerdos que pudieran alcanzarse entre la Unión de Transportistas y la empresa minera, los cuales dependen del diálogo y la voluntad que existe entre las partes.

Reiteró la disposición que existe de continuar trabajando con ambos, a fin de que existan acuerdos que beneficien a ambos, pero sobre todo a las familias de la región de Mazapil.