Un grupo de estudiantes de Zacatecas construyó un simulador de bicicleta donde el usuario podrá ejercitarse mientras visualiza un recorrido en un mundo virtual y genera energía eléctrica con el movimiento.

Tiene el equipo una base en donde se puede montar y desmontar una bicicleta para hacer recorridos virtuales, explicó Jorge Luis Bustos Armas, estudiante de ingeniería mecatrónica de la Unidad Profesional Interdisciplinaria de Ingeniería, Campus Zacatecas, del Instituto Politécnico Nacional (UPIIZ IPN).

Se podrán visualizar los trazados mediante un simulador por medio del casco "Oculus Rift", tecnología de realidad virtual que genera la inmersión del usuario, indicó Bustos Armas.

"Con esto pretendemos incentivar a las personas a que realicen ejercicio de una manera diferente. Aun estando en un mismo sitio pueden sentir el movimiento de subidas o bajadas de acuerdo con el mundo que estén visualizando, que va acorde con la plataforma", dijo el estudiante.

"Además del ejercicio, la parte mecánica de la energía que se produce al estar pedaleando generará energía limpia suficiente para la carga de un celular", agregó.

Podrá configurar el usuario su índice de masa corporal, así como las características de su bicicleta, mencionó Bustos Armas en una entrevista con la Agencia Informativa del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).

Mostrará el equipo la cantidad de calorías consumidas y kilómetros recorridos dependiendo de la velocidad del pedaleo, además, la información se actualizará cada 10 segundos.

Tienen planeados 4 mundos para la primera etapa, uno de noche en un bosque y el resto corresponde a 3 estaciones del año, verano, invierno y primavera, además, añadirán un recorrido virtual por el Centro Histórico de Zacatecas.

La premisa del simulador es la interacción del usuario con el movimiento o rigidez del pedaleo, ya que la mecánica está en sincronía con el recorrido virtual y la plataforma no está inmersa en una bicicleta, explicó por su parte Diego Iván Esparza Palacios.

A su vez, el mundo virtual se conecta a la base interactiva del velocípedo con un microcontrolador llamado Arduino.

"Con este podemos traducir las señales del mundo virtual al sistema físico. En este caso es el motor, el mecanismo. Según la inclinación del mundo se dará la resistencia de la llanta para que se tenga la sensación de que es una pendiente, 15 grados a -15", detalló Esparza Palacios.

Como parte de las mejoras del proyecto, los alumnos plantean perfeccionar la estructura del mecanismo e instalar el sistema en un gimnasio que imparta clases en bicicleta de tipo spinning, para aumentar la producción de energía limpia.

"La idea del gimnasio es lo que planteamos que pudiera ser nuestro principal usuario; sin embargo, también está la opción de que si una persona está interesada en montar el mecanismo en su propia casa lo pueda hacer y adaptar a la bicicleta que ya tenga", apuntó.

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