Jueves 18 Abril 2024

A un año de desaparición de cazadores, solo uno ha sido encontrado

De los ocho cazadores de León, Guanajuato, desaparecidos en Zacatecas, solo uno de ellos ha sido localizado, sin vida, por la Procuraduría General de Justicia del Estado de Zacatecas (PGJEZ).

El cazador que fue identificado es Ernesto Cordero Anguiano, de 37 años, cuyos restos fueron encontrados en el predio Las Negritas, en Calera, Zacatecas, lugar donde Antonio Olivares alias “El Tongas” informó que torturaron a sus compañeros.


La historia inició el 4 de diciembre del 2010, cuando 10 leoneses que se dirigían con rumbo a la Sierra de Morones para practicar la cacería deportiva fueron detenidos por Policías Preventivos del municipio El Plateado de Joaquín Amaro y después fueron entregados a un grupo armado.

Los únicos que lograron escapar de los plagiarios fueron un joven que tenía entonces 15 años y Antonio Olivares alias “El Tongas”, de 25, quienes se convirtieron en una pieza importante para el esclarecimiento del caso.

El joven de 15 años fue liberado por el comando armado por tratarse de un menor de edad, mientras que El Tongas logró escapar con una herida de bala en la pierna y pudo observar el lugar donde fueron torturados sus compañeros.

El 15 de diciembre, en Jalpa fue hallada la camioneta Suburban roja modelo 1994 en la que viajaban los cazadores.

Eran integrantes del Club Cinegético Casa, Tiro y Pesca “Aldama”, que tiene sus oficinas en la colonia El Coecillo. Todos se dedicaban a la venta de calzado en la Zona Piel de León, Guanajuato.

Siete de ellos aún siguen en calidad de desaparecidos:

 

  • Diego Cordero Anguiano, de 47 años
  • Alán Josué Bocanegra López, de 19 años
  • Juan Diego Cordero Valdivia, de 22 años
  • Sergio Sánchez Pérez, de 32 años
  • Mario Alberto Reyes, de 26 años
  • José Javier Martínez, de 46 años
  • Héctor González Cervantes, de 37 años


La denuncia en Guanajuato
La primera denuncia sobre la desaparición fue hecha en la Procuraduría General de Justicia del Estado de Guanajuato, donde se manejó que ocho de los cazadores fueron ejecutados por presuntos policías de Joaquín Amaro.

El 10 de diciembre del 2010 fue cuando las autoridades  guanajuatenses remitieron el desglose de la averiguación previa número 353/2010 a la PGJEZ.

Se revive la trágica historia de la desaparición
El denunciante aseguró que su hermano y su sobrino se fueron el 4 de diciembre de cacería en compañía de otros amigos al municipio de Momax, al rancho de San Lorenzo, y regresarían el día 6, pero nunca llegaron.

Fue entonces cuando algunos familiares fueron a buscarlos y vecinos del lugar les informan que los habían visto tomando cerveza a un lado del billar con una persona que habían contratado como guía, siendo el 6 de diciembre el último día que los vieron.

En el testimonio se mencionó que fueron interceptados por un retén de policías municipales del poblado de El Plateado, los cuales les indicaron que debían de mostrar los permisos de portación de armas de cacería que llevaban y que tenían que hacer el chequeo en un poblado cercano.

Posteriormente, fueron recibidos por otro grupo de policías municipales, los cuales los amarraron, los golpearon y torturaron, los subieron a unas camionetas y los llevaron a una brecha de terracería en la sierra.

En el viaje, uno de los cazadores -El Tongas- saltó de la camioneta y corrió, logrando huir a pesar de ir lesionado de una pierna; además, pudo observar cómo rafagueaban al grupo de amigos y, por último, vio cómo quemaban los cuerpos.

El Tongas caminó sin rumbo hasta llegar a una carretera donde pidió "aventón".

Arraigan a policías del Plateado
Para el 16 de diciembre del año pasado eran 12 los policías detenidos relacionados con este caso, de los cuales cuatro confesaron haber participado en la desaparición de los cazadores.

Para darle agilidad a las indagatorias, el 4 de febrero del 2011 se realizó una reconstrucción de los hechos, a la cual asistió El Tongas y logró identificar a cuatro policías confesos, elemento que fue utilizado para dictar sentencia condenatoria por los delitos de asociación delictuosa y secuestro.

Actualmente se encuentran presos seis elementos y el director de la Policía Preventiva.

PGJEZ presenta video de los desaparecidos
El martes 5 de abril, en Televisa fue trasmitido una videograbación en el que aparecían los cazadores guanajuatenses y sus captores.

El filme casero dura 12 minutos y se pudo observar las actividades de caza que efectuó el grupo, cerca de una presa ubicada en la región de la Sierra de Morones. En las escenas aparecen algunos de los leoneses con sus armas.

En una de las escenas sale un joven, quien muestra dos presas, un lince y un venado que fueron cazados por su compañero Alan Bocanegra y menciona: “Ay, éstas son las presas del Alan, este recuerdo debe quedar para la posteridad”.

En otra toma que, al parecer, fue grabada en la noche en el interior de una casa, se observa a varios sujetos con armas de grueso calibre y también hay una mujer, presuntamente los secuestradores de los cazadores.

En el video, mientras un presunto delincuente grababa, se observa que uno de sus compañeros detiene otra cámara también de los cazadores. Además, se alcanza a escuchar conversaciones por radio y se ve que los delincuentes traen algunas de las armas de los desparecidos.

Este video fue entregado por el Ejército Mexicano a la PGJEZ, debido a que involucra directamente a los delincuentes con el caso de los leoneses.

Zetas responsables de la desaparición mueren en enfrentamiento
Los responsables de la desaparición, de acuerdo a las autoridades, murieron abatidos el 9 de febrero en el municipio de Tabasco, Zacatecas, donde se suscitó un enfrentamiento entre miembros de Los Zetas y militares.

Ahí se reventó una casa de seguridad y se registró una balacera, donde perdieron la vida ocho delincuentes, quienes presuntamente participaron en la desaparición de los cazadores.

Inician búsqueda en el predio Las Negritas, Calera
El pasado 28 de julio, la PGJEZ inició investigaciones e incluso excavaciones en el predio Las Negritas, en Calera, lugar que El Tongas identificó como donde fueron torturados sus compañeros.

Este sitio se encuentra sobre la carretera libre a Enrique Estrada-Calera, a 2 kilómetros de la gasolinera del rancho Los Ángeles, donde El Tongas pasó la noche en el baño después de escapar de sus raptores para después tomar un autobús a las 6 de la mañana hacia Zacatecas y regresar a León.

En agosto, tras comenzar las excavaciones se encontraron los primeros restos óseos que correspondieron a un húmero, una pieza de fémur y un hueso desconocido.

Según información del procurador de Zacatecas, Arturo Nahle García, vecinos de ese lugar refirieron que continuamente hay presencia de grupos delictivos tanto de día, como de noche.

Durante las investigaciones se han hallado casquillos de alto poder, ropa camuflaje como la que portaban los cazadores desparecidos y piezas óseas que han sido analizadas por el laboratorio de genética de la procuraduría estatal.

El pasado 26 de septiembre, en Las Negritas fueron encontrados los restos de uno de los cazadores desaparecidos en diciembre del 2010.

Hasta la fecha se han encontrado al menos 400 restos humanos pertenecientes a diversas personas, muchos de ellos calcinados, motivo que impidió conocer la identidad de los todos los cadáveres.

De acuerdo con el periódico de Guanajuato A.M. y Milenio los familiares del cazador cuyos restos fueron identificados están molestos, ya que en la Procuraduría de Justicia de Guanajuato les ha informado que en los estudios de ADN de las muestras óseas indican que no es su pariente.

 

FOTOS: ARCHIVO