Necesitamos entender que las hormonas del estrés, que son cortisol y adrenalina, se elevan cuando la persona es incapaz de apagar su respuesta ante la presión, alertó el psicólogo del Issste Juan Valdivia Mata.

Explicó que no todo el estrés es malo: el moderado puede ser positivo y vivificante si se experimenta durante poco tiempo, mientras que el excesivo o crónico es perjudicial y destructor.

Hay varios tratamientos para el estrés, uno es la psicoterapia con apoyo farmacológico cuando es necesario, otro es mantener activa a la persona por medio del deporte, la alimentación, terapias de relajación, manejo de la respiración, actividades recreativas y dedicar más tiempo al cuidado de su cuerpo.

Con un tratamiento buscan que el paciente tenga estabilidad emocional para la toma de decisiones, organizar, decidir, ser más asertivo y lograr un equilibrio.

“Un desafío que nos interese, una oportunidad excitante que se nos presente o una tarea que nos resulte retributiva puede producirnos un estrés favorable, o sea, un estrés bueno”, explicó el psicólogo.

Juan Valdivia Mata alertó, sin embargo, que como país México ha iniciado una carrera del estrés exagerado a muy temprana edad: “los jóvenes de hoy ya están estresados aun antes de poder iniciar sus vidas”.

Hay una “válvula medidora de estrés en nuestro cuerpo”, agregó, las emociones que más nos dañan son ira, falta de perdón, depresión, enojo, preocupación, frustración, miedo, culpa y pena.

Repercusiones del estrés crónico
De no atenderse, se le vincula con una larga lista de problemas físicos:

• Cardiovasculares: hipertensión, palpitaciones, arritmias y mareos
• Gastrointestinales: reflujo gastroesofágico, úlceras, acidez estomacal, indigestión, diarrea, colon irritable, enfermedad inflamatoria de los intestinos, colitis ulcerosa
• Dolores de cabeza por tensión
• Enfermedades de la piel: psoriasis, eczema, urticarias, acné
• Tracto genitor-urinario: infección de la próstata, infecciones vaginales crónicas y recurrentes, micción frecuente, pérdida del impulso sexual e impotencia, infecciones urinarias frecuentes
• Dolor e inflamación: dolor de espalda crónico, fibromialgia, dolor crónico, problemas de articulación temporo-maxilar
• Pulmonares y respiratorios: resfríos, infecciones en senos paranasales, dolores de garganta e infecciones de oído crónica o recurrentes, bronquitis o neumonía crónica recurrentes, asma, dificultad para respirar, hiperventilación
• Disminución inmunológica: fatiga crónica, infecciones crónicas y recurrentes de todo tipo

Mujeres, en quienes más se detecta
Hasta 30 por ciento han incrementado los casos de estrés entre pacientes del Hospital General del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste) en Zacatecas, sobre todo mujeres, informó

Es más detectado el estrés entre la población femenina porque son quienes acuden a consulta familiar y posteriormente son referidas a psiquiatría o psicología, mientras que el hombre se resiste al tratamiento.

La mujer lo manifiesta somatizando con ansiedad, depresión, colitis, gastritis, alergias y otros padecimientos, mientras que el hombre busca curar su malestar con sustancias como alcohol, tabaco y drogas, explicó Valdivia Mata.

“Es bueno el pronóstico en quien se permite asistir a tratamiento, recordemos, pues la gran cantidad de detonantes de la aparición del estrés son violencia, enfermedades crónicas degenerativas, uso de drogas, divorcios, separaciones, pérdidas, problemas económicos”, abundó.

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