Cerca de 15 mil personas marcharon en Zacatecas para conmemorar el Día del Trabajo en un desfile que estaba planeado en 2 contingentes, uno llamado oficial y otro alterno, pero al final terminaron marchando juntos.

El Partido Revolucionario Institucional (PRI) se hizo presente con los gremios y sindicatos adheridos a la Confederación de Trabajadores de México (CTM), quienes portaban gorras con el logo del tricolor y en algunos casos también playeras.

Junto con los agremiados a la CTM iban los del Sindicato Único de Trabajadores al Servicio del Estado, Municipios y Organismos Paraestatales (Sutsemop), estos últimos sumaban el mayor número con más de 5 mil participantes.

Mientras se preparaban para salir estas 2 organizaciones en el cruce de la avenida Juárez y Fernando Villalpando, afuera de la Escuela Normal Manuel Ávila Camacho otro grupo se preparaba.

Convocados por el Frente Social por la Soberanía Popular (FSSP) sindicatos contrarios a las políticas gubernamentales y del PRI se reunían; aunque los bloques debían salir de forma separada al final terminaron juntos desfilando por las calles.

El dirigente del Sutsemop, Armando Moreira, al llegar a la concentración previa al desfile saludaba con gusto a sus compañeros, incluso se ufanaba de que si no hiciera buen trabajo lo abuchearían.

Pero en el contingente de su sindicato había quienes llevaban pancartas pidiendo su salida, al igual que reprochando a la dirigencia que no los defendía, además que también participó un grupo contrario llamado Sindicato Independiente de Trabajadores del Estado de Zacatecas.

Al tricolor tampoco le fue cómo esperaba, pues en Santo Domingo militantes del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) animaban a los participantes en la marcha y los incitaban a gritar "ni un voto al PRI".

Empleados de dependencias estatales e incluso de la propia CTM se sumaban al grito contra el PRI, además de que un par de maestros del Movimiento Democrático del Magisterio Zacatecano (MDMZ) recorría los costados de la marcha con un mono representando al presidente Enrique Peña Nieto, para el cual pedían rechiflas e insultos que encontraban respuesta entre quienes desfilaban.

Cerca del cruce de la avenida Juárez y González Ortega, afuera de la tienda Elektra, se puso un templete para los dirigentes de la CTM, en el cual estaba también el senador Alejandro Tello, a quienes en varias ocasiones los trabajadores lanzaron rechiflas e increparon.

El bloque de trabajadores de gobierno y de la CTM marchó hasta la avenida González Ortega, mientras que el resto de sindicatos y organizaciones se reunieron en plaza de Armas para realizar un mitin.

En las intervenciones algunos oradores destacaron que se haya marchado en un solo desfile y aunque se esperaba un contingente oficialista, al final también hubo manifestaciones dentro de sus filas para protestar contra políticas en contra de la clase trabajadora.

Tras varios pronunciamientos para recordar el Primero de Mayo, expresarse contra las reformas del gobierno federal, las políticas del gobierno estatal, la inseguridad, y pedir justicia por casos como el de Ayotzinapa. El mitin terminó con la quema del monigote de Peña Nieto.

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