Martes 23 Abril 2024

Goitia, símbolo del Festival Cultural Zacatecas 2010

El Festival Cultural Zacatecas 2010 tendrá como símbolo al pintor zacatecano Francisco Goitia, quien está vinculado a la Revolución Mexicana como retrato de la crudeza de ésta, las figuras, los sentimientos de la gente.

Francisco Goitia fue un cronista que, a través de la plástica, muestra lo que es una revolución, con su marcada ascendencia indigenista.


Goitia nació el 4 de octubre de 1882 (el día del señor San Francisco) en la Exhacienda de Patillos, en Fresnillo. Sus padres fueron Francisco Bollaín y Goitia y Andrea Altamira, quien murió al dar a luz.

En su niñez, el ilustre zacatecano estuvo rodeado de verdes paisajes, manantiales, flores y animales. El estrecho contacto con la naturaleza lo llevó siempre en su memoria y fueron esas vivencias determinantes en su trabajo como pintor.

Cuando tuvo edad para aprender las primeras letras, fue llevado al rancho Charco Grande, de la misma hacienda, cursando la instrucción primaria en Fresnillo.

Posteriormente, su padre lo llevo con él a la Hacienda de Ábrego, en donde realizó trabajos de escritorio, luego lo enviaron a la ciudad de México a estudiar artes plásticas, aunque su deseo era ir al Colegio Militar.

Ingresó a la Academia de San Carlos, donde tuvo como maestros a José María Velasco, Julio Ruelas, Germán Gedovius y Saturnino Herrán.

En 1903 permaneció en la Academia Fabrés, uniéndose al grupo de reaccionarios del maestro español y de la Academia.

Fue gran amigo de Tamayo, pero también tuvo relación con los pintores grandes de la su época, conformando con ellos el gran movimiento del arte contemporáneo mexicano.

Poco tiempo después viajó a España. Durante 1904, en Barcelona asistió a talleres y recorrió los museos.

En esa época, su maestro fue Francisco de A. Galí; de este periodo son algunos dibujos al carbón de varios edificios de esa ciudad española, como el “Patio de la Universidad de Barcelona” o “El Tríptico”, con edificios barceloneses.

Sus cuadros no necesitan presentación y explicación detallada como suele suceder con algunos pintores modernos o de nuestros días, sino que la temática y sus colores transparentes y dilatados son únicos.

Establecido en España, recibió una beca del ministro Sierra en Italia, en donde estudió la buena pintura renacentista, permaneciendo en Roma al mostrarse interesado en la arquitectura clásica, especialmente en el Foro Romano entre otros monumentos. De este periodo son los temas arquitectónicos que pintó.

Expuso con mucho éxito en Italia y recibió una medalla por sus obras. Sólo permaneció cuatro años y se vio obligado a regresar a México con la caída de Díaz, perdiendo su beca.
 
Durante su estancia en Zacatecas, pintó obras como: "Paisaje de Santa Mónica" y  "La Huerta del Convento de Guadalupe, Zacatecas".  

De 1918 a 1925 trabajó como dibujante de objetos y sitios arqueológicos con el antropólogo Manuel Gamio; esta relación y el profundo amor a sus raíces lo influenciaron fuertemente. Pintó indígenas, logrando realizaciones magistrales, de gran vitalidad y realismo.

Una de las obras maestras del siglo XX fue “Tata Jesucristo”, con la que obtuvo el primer premio en la Bienal Interamericana de Pintura y Grabado, es un cuadro en donde "Jamás el dolor ante la muerte alcanzó una expresión más alta, más desgarradora en que el dolor de la potencia, borra a Dios como único consuelo", que lo sitúa en la historia como un gran artista.

Fue profesor de arte durante 7 años en la Secretaría de Educación Pública.

Goitia militó en las huestes villistas, reflejo de esos tiempos son sus pinturas de los ahorcados, paisajes desgarradores que reflejan muerte y desolación.

Se fue a vivir en 1920 como un ermitaño a una choza de Xochimilco, hecha con sus propias manos. Ahí su contacto con los indígenas y la sencillez de sus costumbres le hicieron llevar una vida entregada a su quehacer.

Fue hombre fuera de las superficialidades de la vida cultural e intelectual de la ciudad de México, a la que se rehusaba pertenecer.
 
Goitia era un hombre profundamente humano, extremadamente sensible, que amaba a su pueblo, prueba de ello es su obra, que da cuenta de la miseria y desolación humana, representadas con una sensibilidad inusual.

Su muerte, por demás tranquila, ocurrió en la madrugada del 26 de marzo de 1960, en su humilde casa de la parada de tranvías "El Torito", hoy "Francisco Goitia" en el barrio de San Marcos, Xochimilco, Distrito Federal.

Goitia está situado entre los grandes precursores del movimiento del Arte Contemporáneo Mexicano, al lado de David Alfaro Siqueiros, José Clemente Orozco, Diego Rivera, Rufino Tamayo y Carlos Mérida, entre otros.

Una de sus obras más importantes es “Autorretrato”, pintura inconclusa que había empezado en 1943, que fue tomada como imagen del Festival, a 50 años de su muerte.

 


NOTAS RELACIONADAS:

Lluvia de talentos en el Festival Cultural de Zacatecas 2010